En este apartamento de Benalmádena se ha proyectado una cocina sobria y funcional para un espacio reducido con muchas posibilidades.

El resultado es un espacio perfecto para aislarse de las obligaciones del día a día, disfrutar de uno mismo o en pareja y perder la noción del tiempo cocinando nuevas recetas. Una cocina para cerrar la puerta, dejar fuera las preocupaciones y simplemente vivir y fluir.

Amueblamiento

El espacio, condicionado por el acceso al lavadero (en el fondo), la puerta principal (en el otro extremo) y las reducidas dimensiones, se ha aprovechado gracias a un amueblamiento a medida lineal en paralelo. Esta disposición ofrece varias ventajas: la circulación natural por el espacio queda libre, las zonas de trabajo ganan en fluidez y todo queda al alcance de la mano con solo dar unos pocos pasos.

Zona de trabajo

El lateral destinado a zona de trabajo y almacenaje cuenta con muebles altos y bajos con diferentes combinaciones. Está equipado con una encimera de cuarzo gris zara (Silestone) que se extiende como revestimiento por la pared y en el interior del fregadero, una solución funcional (aporta limpieza a la zona de trabajo) pero también estética (otorga unidad al espacio).

Frentes

Los frentes de los muebles están equipados con el modelo de puerta Braque 05 laminado mate con un tirador tipo uñero de acero inoxidable integrado. De esta forma se disfruta de una superficie muy uniforme al no tener tiradores, suave tanto para la vista como para el tacto y con gran durabilidad para resistir el uso diario de la cocina.

Interiores

El interior de los muebles está pensado para que reine el orden en la cocina. Con las distintas soluciones de integración y almacenaje, todo encuentra su sitio y está organizado.

Los interiores de los cajones se pueden personalizar con bases modulares que se pueden compartimentar libremente con separadores para guardar ollas, sartenes, cuencos, etc.